FITO

Publicado: 10-12-2012 en Sin categoría

Después de varios años de ausencia, Fito Páez ofreció un concierto al público cubano el pasado 5 de diciembre, en el teatro Karl Marx.
Conseguir entradas para esta clase de espectáculos es tan difícil como lo fue en mi infancia reservar turno por teléfono para comprar juguetes y que te tocara el primer día, o ahora conseguir cebolla cuando se pierde. Sin embargo, al final tienes la impresión de que todo el mundo resuelve, de que todo el que ves nervioso afuera, buscando una vía para entrar, acaba haciéndolo. Así, el teatro tenía la densidad de población de un bote del Titanic o el metro de Tokio en horas pico. El flaco salió y anunció que primero pasaría el documental de un reciente concierto en Buenos Aires por el 20 aniversario del disco El amor después del amor, y después cantaría algo. Demasiado bueno para ser cierto, pensé, ahora hay que sonarse hora y media de catarsis ajena para luego escucharle un par de temas en vivo, y eso será todo, total, el cubano aguanta cualquier cosa.
Por suerte me equivoqué, y conmigo el grueso de los concurrentes que, seguro, pensaron lo mismo. El documental estuvo bien, pero la actuación de Fito al piano después de la película fue, como diría Kelvis Ochoa, lo más grande de la vida. El argentino arrancó con 11 y 6, siguió con un medley de Ámbar violeta y Giros, y luego, bueno, se sucedieron entre otras Senza una donna (en sorpresivo dúo con Zucchero, que haría lo suyo en el ISA tres días más tarde) El breve espacio en que no estás, con Robertico Carcassés al piano, Tira tu cable a tierra, con Santiago Feliú, Un vestido y un amor, Dar es dar, Al lado del camino, un trozo de Sueño con serpientes, para terminar con una conmovedora versión a capella de Yo vengo a ofrecer mi corazón. El público flotaba dos centímetros por encima de las sufridas butacas.
Estuve ahí durante el primer concierto habanero del rosarino, en la segunda mitad de los ochenta, y luego en otro recital en la Plaza de la Revolución. Antes, socios como Frank Delgado me habían pasado cosas de argentinos insignes, del calibre de Baglietto (a quien también tuve la suerte de ver en el Karl Marx) y el gran Charly, pero al descubrir a Fito lo seguí disco a disco. Y no sólo yo: se ganó a los cubanos, y hay numerosos indicios (canciones, amistades, visitas) de que La Habana, a su vez, se enlistó muy arriba entre sus amores.
Conservo una grabación pirata de un viejo concierto de Fito en el mismo recinto habanero en junio de 1993, y de otro posterior, sólo a piano. Lo vi alguna vez en el Hotel Nacional durante el festival de cine, cuando trajo sus películas. Lo envidié a muerte, como todo el mundo, por haber tenido a Cecilia. Fuera de Cuba me ocurrió a menudo que me encontraba invitado en casa de alguien y entonces un tipo cogía una guitarra y empezaba a cantar Un vestido y un amor, y todos los latinos le hacíamos un coro bastante prescindible. Ahora bien, si existiera un club de fans de Fito en La Habana, el presidente sería mi amigo el actor Carlos Gonzalvo.
El amor de Páez y La Habana, como queda dicho, viene de lejos. Y el reencuentro fue exactamente el de viejos amantes. La del 5 de diciembre fue una noche extraordinaria para nosotros, pero apostaría que también para él.

comentarios
  1. Dolores Brossard Duharte dice:

    No pude estar en el concierto, pero en ese aire enrarecido de amor, mi familia me recordaba y mi esposo cantaba para mi, se los agradezco mucho!!!!

  2. charlitos dice:

    No dudo de la genialidad de Fito , e inclusive algunas canciones de el me resultan agradables , pero siempre seguire prefiriendo a Cortes y Baglieto .

  3. Atd3d dice:

    Adoro las canciones de fito, y tambien soy miembro vip del club de envidiosos de que tenia a cecilia. El concierto debio estar magico, los que estamos fuera solo hemos visto algun que otro fragmento de Fito + Van Van. !! Que par !! Pero en opinion la mescla presagiaba desastre y en efecto, no se si es youtube o que pero quedaba fatal. Al parecer nadie es perfecto…ni Fito 😉

  4. F. Hebra dice:

    He tratado de acercarme a la obra de Fito desde su comienzo, hoy en la actualidad…sigo tratando. Me quedo con Les Luthiers:

  5. Alache dice:

    Me alegro mucho que que la juventud y la no tan, hayan podido disfrutar de un tipazo como Fito, ya son raras las personalidades que van a Cuba, aun con deseos, para no hacerle jueguitos al régimen castrista, Serrat Y Sabina entre ellos, es una pena que la gente tenga que seguir pagando estas cosas y el embargo, por una familia que sin ningún tipo de pudor, se ha adueñado por mas de medio siglo de un país entero y su destino.
    De cualquier manera,bien por Fito.

  6. deepdimensionsmusic dice:

    Gracias x los detalles.»Fito y Robertico» me recuerda aquel primer concierto en los 80 en el KM (Subcede del Festival de Varadero)donde derrepente y sin avizo interpreto RUMBA DEL PIANO con nadie menos k con Gonzalo Rubalcaba(En sus mejores tiempos) y el apoyo de la Xiomarizima Laugart.Oh Mann…daria medio millon si los tuviese x volver a escuchar esa version. K Tiempos, k Cuba, K Fito. Pero me conformaria con escuchar las grabaciones k tienes de los 90s.Ya te encuentro en cuanto pise nuevamente L’Habana…. «Alles Gute für dich mein Freund auf #Cuba2013».

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